[nettime-lat] DE BUSCAR EL AMOR

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Tacto de luz
                                   
      oscura de deseo

               tu palabra.

*de Cristina Villanueva. 
pluma@velocom.com.ar


De buscar el amor


1.Voy a buscar*

 

Voy a buscar la noche de tus ojos

para dormir en un claro de luna

en una flor silueta claroscura

humedecida por tus labios rojos

y conversar con los ardientes pájaros

cuando se vistan con el amorío

en el otoño de los blancos cántaros

en el perfume de tu ser dormido.

 

Voy a subir por nubes y luceros

hasta besar el cielo de tu boca

voy a volar con esas alas rotas

hasta tocar la gloria de tus senos

y soñaré con la ilusión sin tiempo

en esa piel de almendras y cantares

la desnudez de todos tus lunares

voy a cubrir con insaciables besos.

 

Voy a buscar la noche de tus ojos

en la lluvia de abril 

en la alborada

en una flor de viento dibujada

en el temblor de nuestros cuerpos rotos

en la brisa

               en el sol

                           en la montaña

en cada gota de licor de luna

en la manzana 

en la pasión impura

en la sombra de ayer

                              bajo la cama.

Voy a buscar la noche de tus ojos

en todos los resquicios... para amarla.



*de E. Antonio Torres Glez etorresglez@yahoo.com.mx

Durango, Dgo. México

 

 

 



2.Digo*



Digo

que en las inmóviles pestañas de la noche
abandono un galope, un palomar, la jaula
de un sismo revoltoso, irrevocable,
de un siglo a contramano, amortajado
con esquirlas de estériles desvelos,
fatigas, condenas y expiaciones.

Digo

que me quedé clavada
en este punto muerto del vía crucis,
que no entiendo el revés, el contratiempo
donde abdicó el asombro,
ni la violenta sacudida del sollozo
en los recintos de las irrupciones.

Digo,

y sin querer decir vuelvo a decirlo,
que aquel gigante interventor de la ternura
que atestaba las internas alacenas
con versos y almanaques reciclados,
calzó las botas de las siete leguas
y parte ya rumbo al cadalso de la ausencia.

Digo

que en esta madurez dificultosa
con una póliza de frustración entre las piernas,
una corte de nieblas y espinas irresueltas
y el dolor retenido en los riñones,
me doy la absolución sin mea culpa
detrás del biombo que signara mi clausura.

*de Fanny Garbini Téllez. fannyte@ciudad.com.ar

 
3.Amorío*

 

Será que te conocí en una mañana

en que la estrella temprana agonizaba de amor

será que fue un ruiseñor el que cantó esa mañana

y sólo tu me mirabas apacentando mi sueño

en ese rostro trigueño pintadito de pasión

se perdió mi corazón en ese rostro trigueño

en donde la luna duerme y la cigarra se prende

entonando su canción bajo los rayos del sol

acariciando tu falda 

                           de flores y de jirones

de nubes color jazmín y rostro de querubín

amándote no se donde...

Será que no me he olvidado del color de tu mirar

en donde se han de encontrar el futuro y el pasado

en el espejo de un beso duplicando la pasión

reflejo de la ilusión escanciándose en tu cuerpo

como el licor que en la copa se besa con el cristal

para mi bien o mi mal humedeciendo tu ropa.

Será que siento tu boca en mis vértebras vibrar

como vibra el temporal cuando el deseo lo provoca

y extendiéndose en la roca hace al viento germinar.

Será que el rumor del río me recuerda tu silueta

y el calor de las pavesas alimentan mi amorío

y encienden el pecho mío al fuego de tus promesas.

 

 

* de E. Antonio Torres Glez. etorresglez@yahoo.com.mx

Durango, Dgo. México



4.Será primero la victoriosa rosa*



llenando con su luz el mundo?

De la tierra su coronada estrella

anunciará el derrumbre del imperio?

Llegará en fulgurante tipografía

a las imprentas liberadas, la noticia,

antes que tú, mucho antes que tu risa

que tú, mi amor, que tú , definitiva?

Cómo te llamas, entonces... utopía?

Eres todavía más que la bandera

que de cima en cima de la noche

salta adelante, siempre lejos?

Qué cosas han de sucederle al planeta

antes que tú, mujer, antes que tú?

Cuando te rozo ya me miras desde otra parte.

Vienes trayendo la vida y te marchas

dejándome la soledad más dolorosa.

Qué noche extensa, qué desatada lluvia

de mareas, qué infierno derrotado

tendrá que suceder bajo las horas

para que tú, amor, que tú, en mí, entera?

Voy por tí con tantas preguntas....

así voy por ti, detrás del viento.

Y me llamas, me nombras, y te alejas

y a cada instante sucumbo y me revives.

 

* de Gabriel Impaglione. impaglioneg@yahoo.es





5.Los ecos del deseo*

           
            ( boceto )


           Late mi campana su luminosa congoja
           su hervor indescifrable como sangre de vientos
           que obstinado inerva el sol,
           late y grita su vivencia
           su demencia de reinos sin sombra
           lenta como nacerse cada día y cada hora
           sin saber por qué se abren las costuras
           para vaciarse hacia el mundo,
           esa madeja de tactos que nos cierne
           y nos absorbe poro a poro.
            
            Pero es después que llegan los ecos
            el escándalo de los ecos vivos y muertos,
           atónita avalancha sin tregua
            de lanzas hurtadas como espejos,
            un ejército mineral y numinoso
            que desagua en los ojos y las venas
            para alimentarnos sin dejar que huyamos
            cuando el antígono escupe realidades
            y nos devuelve, minucioso
            las membranas y las cifras de la multitud.

            Y hay que soportar los ecos
            aunque se sumen y multipliquen sin descanso
            ungiendo de fuego las preguntas,
            la miríada galopante de las bestias
            el polen de las flores consteladas
            seres ungidos al mismo pálpito febril
            espectros merodeando el deleite
            de un único y purísimo desenfreno:
            desfallecidos, desfibrados 
            recoger la ábrega cosecha de los ecos
            y al fin dormir.

            El deseo se hunde indolente en su abismo
            para mañana desalmado reintegrarse
            y  volver a rehacernos.
                           deshacernos.

           
         *de j u A n. juanspam@terra.es



6.Cruje la noche*


            Derramo tu nombre
             sobre el polvo gris de la tarde.
          

               Las manos desempañan el cristal
            de la distancia 
               y enajenada, sueño en tu aliento.           
                    Una sonrisa inmemorial
               vaga desnuda
         de mi boca a los leños
               y se exilia en sus chispas.

           La noche cruje sin escrúpulos
             a los locos traenseúntes de la soledad. 

*de Fanny Garbini Téllez. fannyte@ciudad.com.ar

7. Vestir una sombra*

Lo más difícil es cercarla, conocer su límite allí donde se enlaza con la penumbra al borde de sí misma. Escogerla entre tantas otras, apartarla de la luz que toda sombra respira sigilosa, peligrosamente.
Empezar entonces a vestirla como distraído, sin moverse demasiado, sin asustarla o disolverla: operación inicial donde la nada se agazapa en cada gesto. La ropa interior, el transparente corpiño, las medias que dibujan un ascenso sedoso hacia los muslos. Todo lo consentirá en su momentánea ignorancia, como si todavía creyera estar jugando con otra sombra, pero bruscamente se inquietará cuando la falda ciña su cintura y sienta los dedos que abotonan la blusa entre los senos, rozando la garganta que se alza hasta perderse en un oscuro surtidor. 

Rechazará el gesto de coronarla con la peluca de flotante pelo rubio (¡ese halo tembloroso rodeando un rostro inexistente!) y habrá que apresurarse a dibujar la boca con la brasa del cigarrillo, deslizar sortijas y pulseras para darle esas manos con que resistirá inciertamente mientras los labios apenas nacidos murmuran el plañido inmemorial de quien despierta al mundo. Faltarán los ojos, que han de brotar de las lágrimas, la sombra por sí misma completándose para mejor luchar, para negarse. Inútilmente conmovedora cuando el mismo impulso que la vistió, la misma sed de verla asomar perfecta del confuso espacio, la envuelva en su juncal de caricias, comience a desnudarla, a descubrir, por primera vez su forma que vanamente busca cobijarse tras manos y súplicas, cediendo lentamente a la caída entre un brillar de anillos que rasgan en el aire sus luciérnagas húmedas.

 *de Julio Cortazar.

ULTIMO ROUND. Planta baja. Siglo XXI editores .Turin 1.969

  


8. Sueños*
 

Sueños de cielos fingidos como espejos ausentes.
 
centramiento del borde,
 
vértigo de lo inmóvil, 
 
     todavía sueños
 
 
*de Cristina Villanueva. pluma@velocom.com.ar

9. Ciudad vertical*



buenos aires tiene un café 

para que dos se digan algunas de sus cosas



para que escarceando rodeen y se acerquen

en busca del más viejo fuego



para que grite en ellos esa estrella perdida

que asoma en las noches y en el sueño



un café

en que planear la vida

así como las golondras recorren buenos aires



es bien sabido que es una ciudad eterna

llena de puertas secretas y recovecos



véaselos al par

ya salidos del tiempo

*de Carlos A. Roldan croldan46@ciudad.com.ar



10 *

....Solo ante la mortecina luz de la pantalla, una pálida silueta se recorta en la oscuridad de esta oficina que carece de limites, envuelta por una noche de niebla, donde el río, la ciudad y las luces tan solo representan un débil espejismo, un recuerdo sin certeza, una promesa en el vacío.

Vacío, casi desesperanzado, Julián escribe por última vez con dedos temblorosos, intercalando sus propias palabras sobre aquellos signos fugaces, elaborando su propia voz en retórica de Chat:

- Amigo, amiga.... ¿Hay alguien allí? Soy un boxeador noqueado y estoy cayendo..veo mi mano en el aire..estirada hacia la nada..aferrada al vacío. ¿Habrá alguna persona del otro lado? Necesito una palabra, una frase, un hilito de voz en el teclado.. Sigo cayendo. Al otro lado de mi ventana, toda la noche se espeja en la bruma como una muralla fría, sin profundidad. El vidrio condensa surcos caóticos, frías gotas de ausencia. ¿Hay alguien allí?

Nada. Suspira con fastidio. Por más que se esfuerce elaborando sentidos párrafos, aquello se asemeja mucho a la clásica y frustrante "botella al mar". Por más navegación internética que trate de desplegar dentro del ciber-espacio, las probabilidades de que alguien medianamente coherente le conteste son ínfimas. Está a punto de clickear sobre el botón de la X para cerrar la ventana del Explorer, cuando de pronto una parpadeante palabrita de dos sílabas se recorta en medio de la pantalla:

- Hola... 

Sin llegar a definir si se ha propuesto desde el inicio saborear alguna clase de triunfo, Julián acaba por descubrir la magia del contacto virtual. Y vuelve a leer, con una mezcla de desconcierto y desbocada alegría, esa vacilante palabra que reaparece sobre el monitor:

- Hola... ¿Quién sos?

- Julio. ¿Y vos?

- Carmín. Estoy aquí sola, te leo, me parece escuchar tu voz.. Sentí tu mano en el aire. ¿Qué te pasa?

Julián no puede creerlo. ¡Lo consiguió! ¡Alguien existe en el mundo, más allá de la indiferencia del cableado de Internet! Alguien que quizá posea la suficiente sensibilidad como para entender en qué idioma subjetivo le está hablando. Vuelve a leer esa frase y no acaba de atesorar por completo la fortuna del encuentro: Sentí tu mano en el aire. Entonces, se apresura a teclear, dejándose llevar por la improvisación: 

- Estoy en medio de un desierto y no hay una sola gota de amor a la redonda.

(no lo escribo, pero estoy  encerrado en el blindaje de una bruma afectiva, sin encontrar la salida.)

 -Me siento más solo que la soledad misma. Necesito del calor de la humanidad y no sé pedir ayuda. Es..como si nunca hubiese hablado.. Como si no hubiera palabra que sirviera para traducir mi sentimiento. Todas suenan huecas, como ecos del abismo. Son ruido apenas, hasta me parece estar oyendo en este mismo momento el permanente ruido de cascadas rebosantes de erosión en mis palabras. Sonidos sin significado..

Carmen se recuesta sobre el respaldo de la silla, vislumbrando una pequeña lucecita de esperanza entre tanta devastación, en medio de tamaña falta de magia y sensibilidad. Entonces, en un arranque de afectividad y espontaneidad, realiza un acto confesional. Durante sus horas libres, bien sea en el trabajo o en su casa, incluso en el ratito que le queda disponible entre clase y clase, suele escribir en cualquier papelito: servilletas de bar, hojas en desuso, recortes de diario. Luego del garabato, como sutil cazadora de instantes, los va guardando en el bolsillo, para luego depositarlos en la sólida canasta de mimbre que tiene en el living de su casa, desbordante de papelitos, servilletas y pedazos de cuaderno. Uno de sus eternos sueños es el de escribir algún día un bello relato sobre el amor y la vida de gente que, falta de amor, como ella, carece de destino en este mundo.

Entonces,  extrae una servilleta del bolsillo de su pantalón, apenas lo relee, y teclea:

- No sé qué te parecerá esto, pero me gustaría que lo leas:

amor

ya no sé cuál es tu rostro

ya no sé de tu piel

entonces

mis ojos no tienen destino

mis manos no tienen destino

mi cuerpo no tiene luz

ni gozo de oscuridad

ni labios de tu poesía

Ya, no te veo...

detrás del humo del café

y cada aroma a canela y miel

solo despierta al vacío

solo anuncia una nueva partida

Julián experimenta un sacudón afectivo tan cerrado y contundente como una trompada debajo del diafragma. ¿Quién será ? ¿Cómo serán su mirada, su aroma, sus gestos? ¿Transmitirá con su presencia la misma intensidad poética que manifiesta a través de una pantalla? De pronto, la soledad se cierne sobre su cabeza aún más lapidaria que antes. Ahora sabe que hay alguien allí afuera. Y se desespera por encontrarla. 

*fragmento del Capitulo 2 de Amor Virtual, junio del 2002.

  
Amor Virtual



( Novela multi-autoral por entregas )



 

 Inventiva convoca a sus escritores y/o lectores a formar parte de un emprendimiento de comunidad literaria, que trascienda los estilos personales, donde todos colaboremos en la creación artística.

Pensamos en lanzar un proyecto literario que convoque a diferentes escritores a generar un texto común (una única novela), con un tema en común (una historia de amor -sea éste logrado o fracasado-), pero cuyo estilo y desarrollo se vea determinado por las diferentes subjetividades que lo componen.

Lanzamos la idea de una NOVELA VIRTUAL, en la que cada escritor será el autor de un capítulo entero de la misma -un eslabón particular de la cadena literaria-, que determinará a su vez la continuidad y desarrollo de la obra en general.

 

MODO DE PARTICIPACIÓN
 

Podrá inscribirse todo lector / escritor que reciba la suscripción de INVENTIVA SOCIAL, y desee participar del proyecto, sin límites de edad o nacionalidad. Para ello, deberá enviar un e-mail solicitando una reserva en la lista de participantes a la siguiente dirección: aldima@interlap.com.ar

El mismo debe tener como título el nombre del proyecto: AMOR VIRTUAL.

  A la brevedad, le será respondido, informándole cuál es su lugar en la lista de participantes.

La fecha límite de inscripción será el 29 de febrero de 2004

 

FUNCIONAMIENTO DEL PROYECTO
 

Una vez armada dicha lista, suponiendo que ésta cuente con 10 autores (es un número al azar), se procederá de la siguiente manera:

-         El autor que figura al tope de la lista será informado por el coordinador del proyecto (ALDIMA) que ya puede comenzar a escribir su capítulo. A partir de la fecha de recepción del e-mail donde se le informa lo ya explicitado, el autor Nº 1 dispone de 15 días para desarrollar su capítulo. Los eventos ficcionados quedan a libre elección del autor, pudiendo elegir la trama y los personajes que su propio deseo literario le dicte.

-         La continuidad narrativa no tiene por qué ser estricta. Cada autor puede seguir la línea narrativa que iniciara el autor precedente, o cambiarla de manera radical, retomando una línea que quedara suelta en capítulos anteriores o desarrollando una nueva.

 La historia no tiene por qué tener una lógica externa, salvo la de su propio desarrollo literario (con lo cual, el grupo de autores se exime de toda responsabilidad por el producto global que resulte de la experiencia)

-         Una vez concluída la redacción del capítulo 1, el autor Nº 1 se lo envía por e-mail a ALDIMA, quien a su vez lo reenviará a Eduardo Coiro (para su edición en el newsletter), y le comunicará al escritor Nº 2 que ha comenzado su turno para participar en el proyecto. Éste posee del mismo plazo que el escritor Nº 1 para concluír la redacción de su propio capítulo, es decir, 15 días. Una vez concluido, realiza los mismos pasos que ya realizara el autor Nº 1, y así sucesivamente hasta completar el listado de 10 autores.

-         Una vez completado el listado, y según el desarrollo obtenido por la historia, del puesto Nº 10 se vuelve al Nº 1, por lo que el primer autor retoma la redacción luego de que otros 9 autores hayan moldeado sus líneas iniciales a su antojo.

-         En caso de que un determinado autor no consiga tener listo el capítulo que le corresponde para su participación en el proyecto, debe enviarle un e-mail a ALDIMA a fin de comunicarle tal eventualidad, a lo cual ALDIMA se comunicará con el autor siguiente de la lista para informarle que le ha llegado el turno. Aquel que debiendo entregar su capítulo no lo haya entregado en tiempo y forma, será automáticamente retirado de la lista -sin posibilidad de reincorprarse-, continuando el proyecto con el autor siguiente.

-         Sugerimos entregar cada capítulo en un archivo de Word, escrito en tipo de fuente Comic Sans MS, tamaño 12, para su mejor visualización en el newsletter correspondiente. Debe quedar claro quién es el autor (su nombre real o seudónimo) y cuál es el número del capítulo presentado.

-         Cualquier duda formal que se le presente a quienes deseen participar, así como a los integrantes de la lista definitiva, deben comunicarse con ALDIMA (aldima@interlap.com.ar) Cualquier duda en función del desarrollo narrativo o estilístico del texto en común debe ser resuelto por cada uno de los participantes.

 

Los Esperamos , sabemos que vamos a contar con los compañeros de la comunidad literaria de 

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*Eduardo Coiro. inventivasocial@hotmail.com





 
 
 

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